Hoy se cumple un aniversario más del 24 de marzo de 1.976. El plan Cóndor había empezado en América Latina el 11 de septiembre de 1.973 con la caída de Salvador Allende. El plan Cóndor que cercenó la democracia en todo el continente, que endeudó a nuestros países con los organismos multilaterales de crédito hasta el paroxismo, que asesinó a 600.000 latinoamericanos, se instaló con mucha fuerza un día como hoy de marzo de 1976. Caían 30.000 detenidos/as desaparecidos/as, se instalaba la más feroz dictadura de toda nuestra historia que nos endeudaba en 42.500 millones de dólares, que destruía toda nuestra vida democrática, nuestras libertades, nuestros derechos, que desindustrializaba el país.
De los 30.000 detenidos/as desaparecidos/as, hay que decir con toda claridad, que el 80% eran delegados de las distintas comisiones obreras y sindicatos del país. Lo que querían era desarticular, desangrar, desmembrar a la clase trabajadora e instalaron la ideología neoliberal conservadora. La misma de Macri, la misma de Cambiemos -hay que decirlo con toda claridad- con otros apellidos, los Martínez de Hoz, bueno gentuza por el estilo, una ideología que atacaba la política, que atacaba al Estado. ¿Te suena cuando lo escuchamos a Milei y a todos esos forros hoy? Atacaba la política, atacaba al Estado, atacaba a los sindicatos, que creían en la ausencia del Estado, en la liquidación de los derechos del Pueblo, en la subordinación total y definitiva a las políticas del imperialismo norteamericano. Eso fue la dictadura.
Por eso, aquellos que hoy están escasos de memoria les digo que durante dos o tres meses anteriores al Golpe se creó un clima. Un clima de deterioro de Isabel Perón, de incertidumbre. El clima del Golpe, el clima de que eran todos ladrones, que nada servía para nada, que había que terminar con el peronismo. Claro y la clase media compró. Y el golpe, yo te diría, hasta tu apoyo silencioso, cobarde y ruin de las grandes mayorías populares que durante varios años sostuvo que los argentinos eramos “derechos y humanos”.
Aquel clima era este clima. Aquel clima era este clima. Esos climas de desánimo, de desesperanza, que la política es una mierda, que el Estado no sirve para nada, que hay que cambiar el estado de cosas, que quiere ignorar la esperanza, la confianza en el futuro. ¡Hijos de ****! Son siempre los mismos. Para que después vengan y hagan lo que hizo Macri que hoy anda por todos los canales dándonos lecciones de política, dándonos lecciones de moral, de economía. Tipos que desbastaron el país, que nos endeudaron en 44.500 millones de dólares y los sacaron de Argentina, se fueron y están ahí cagándose de la risa de nosotros. Nadie va preso. El padre de Macri fue socio de la dictadura 7 forro y sigue siendo socio de los peores intereses.
Por eso, es el día de la memoria, el día la verdad, el día de la justicia, el día de los 30.000 el día de las Madres, de las Abuelas y de los Hijos. A mí me verán, como me vieron siempre al lado de ellos. Fui a la primera marcha de la resistencia en el ‘79 en Perú y Avenida de Mayo acompañando a doña Cuya Elisa Hoffman y a sus hijos Martini horas apenas era un pibe y ya estábamos ahí poniéndole el pecho a las balas como le pusimos siempre.
Por eso, les ruego a todos que estemos unidos, que debatamos, que tengamos diferencias, aunque sea los gritos, pero cerremos todos los caminos para que ellos no puedan volver en el 2023. La Argentina no se merece a Macri y a toda esa basura de la peor calaña.
Esa basura que creen que son eternos. Un día, en unp de esos almuerzos organizaba Cristina y nos sentaba en una misma mesa con los dueños de la Argentina pude decirle a Pagani en la cara: “vos te vas a morir igual que yo. Te van a llevar en pelotas, te van a meter en un cajón y te van a enterrar igual que a mi. De esta tierra no te vas a llevar nada. ¿Por qué no abrís tu corazón, tu cabeza y tratas de que este tránsito por la tierra le podamos hacer la vida un poco mejor a millones que miran con la nieta apoyada contra el vidrio”.
Unidad a compañeros, unida carajo, unidad. Le pido a Alberto, le pido a Cristina. A Cristina y a Alberto, unidad, unidad para la victoria. Unidad para la democracia con justicia social para la soberanía política. Unidad para vivir mejor, para tener una Argentina para todos/as. ¡Un abrazo enorme!
Y hoy nadie se queda en casa. Todos en la calle. Hoy a las 12 voy a estar en mi Independencia y Avenida 9 de julio, los que quieran marchar conmigo que vengan. Va a estar Juan Ramos Padilla vamos a estar juntos ahí para para decirle que sí sobre todo al futuro, a la esperanza. ¡Abrazo grande!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario