EDITORIAL DE LUIS D’ELÍA: LA CÁRCEL DE TODXS NOSOTRXS ES UNA POLÍTICA IMPERIAL.

El viernes a la noche, en Intratables, yo decía esto: “En Haití también hay problemas con los derechos humanos pero Estados Unidos no se ocupa ¿saben por qué? Porque ahí no hay petróleo”. Premonitorio ¿no? Anoche asesinaron al presidente de Haití, Jovenel Moïse. Con el transcurrir del día veremos cuáles fueron las circunstancias. Ahora Haití que sufrió gravísimos problemas con los derechos humanos no está en la agenda porque Estados Unidos cada vez que se mete en un tema, tiene intenciones subalternas. ¿Cuál es la intención subalterna en Venezuela? El petróleo. Estados Unidos se quiere quedar con la Cuenca del Orinoco a 2.000 kilómetros de las costas norteamericanas. Estados Unidos busca, de alguna manera, siempre ver como detrás de todo está la garra imperial para despedazarte. Si detrás de un problema político no hay una conquista económica, los tipos no se meten. Haití, no les importaba porque en Haití no hay nada para robar, el Imperio no tiene nada para robar, sólo hay pobreza y olvido. Me alegro haber anunciado esto, lamento enormemente que eso haya terminado con el asesinato del presidente de Haití, ni más ni menos. El gringo ladrón sueña con volver a tener el barril de petróleo a seis dólares y llevarlo rapidito a casa sin tener que hacer costosos viajes desde Oriente. Tienen allí la reserva de petróleo más grande del mundo, la Cuenca del Orinoco. Gringo ladrón, “gringo go home'', como dice toda América Latina.

Hablando de gringos, porque no crean que la prisión de los 50 presxs políticxs argentinxs, con Milagro Sala a la cabeza, es indiferente o está aislada o está lejos de los Estados Unidos. La cárcel de todxs nosotrxs es una política imperial, en el caso de Luis D’Elía, con certificado y todo, cable de Wikileaks 1222. Esa política se llama Lawfare y hace más de 40 años se llamaba Plan Cóndor, los mismos planes imperiales con otros rostros, con protagonistas distintos. Antes eran los Generales que iban a la Escuela de las Américas a aprender a torturar, a matar, a reprimir, a hacer desaparecer. Hoy más de 40 años después, son los jueces, los jueces del Lawfare que la Embajada les paga viajes, perfeccionamiento, le llaman ahora, les dan subsidios y les pagan el acompañante y el viaje. “Gringo go home”. El gringo ladrón, el gringo norteamericano, la peor plaga que tiene América Latina. Algún día los Pueblos del Continente terminarán con esta historia tan oprobiosa y tan jodida. 

Ahí están los cumpas, muchas carpas, muchas de verdad hicieron noche y van a hacer noche hoy y mañana, hasta el viernes 9 de julio, diciendo que “queremos libre a Milagro Sala”, no queremos más show, no queremos declaraciones solidarias de ministros/as, diputados/as. Queremos libertad para Milagro, queremos que no miren para otro lado; queremos a Milagro en la calle libre a 2.000 días de la injusta detención, ya van 550 días del Gobierno de Alberto y Milagro está presa. No hay Reforma Judicial y no hay un carajo, no hay nada. Que Alberto Fernández cruce la calle y vaya a darle un abrazo al “Coco” Garfagnini y le entregue el decreto de indulto de Milagro Sala. 

Recién Javier, leía un dato de las encuestas que dice que en la franja joven hay escepticismo, en la franja joven hay bronca con la política y hay bronca con los nuestros. ¿Saben por qué? Porque hemos perdido la capacidad heroica de hacer las cosas porque hacer política es hacer las cosas con heroísmo, con trascendencia, golpeando el rostro del poder, cacheteando oligarcas, persiguiendo piratas imperiales subidos a nuestro Rocinante de sueños para poder construir una historia distinta. La política de los moderados es esta, vacía, chota, insulsa, de mierda, que no conduce a nada. Se gobierna para el Pueblo cuando se enfrenta poderes.

Hoy se cumple un nuevo aniversario, en que gracias a Néstor y a Cristina, Videla terminaba en la cárcel, era declarado genocida, condenado a 50 años de cárcel y finalmente, moría en una cárcel común en Marcos Paz, eso significa tener pelotas, ser heroico, eso significa cambiar la historia. Por eso, les digo a todos ha llegado el momento de decir basta, de romper la unidad, no. Nunca vamos a romper la unidad somos conscientes de lo que la unidad significa. Lo que no queremos es que la unidad popular termine en manos de unos forajidos que tienen la careta puesta. En este gobierno tenemos una alianza con Massa, que Massa dice que en la Argentina no hay presxs políticxs. Al carajo con Massa, al carajo con los que piensan como él. 

El otro día me decía un Ministro, importantísimo del gobierno, por teléfono me decía “mirá Luis, la justicia macrista hoy está en pausa, si por razones políticas la pausa cambia de estado, muchos de nosotros vamos a tener que irnos del país o vamos a terminar en las cárceles de la peor manera”. Entonces los convoco a tomar conciencia, a darnos cuenta. Luther King decía algo muy potente que hay que rescatarlo por estas horas: “ lo importante no es cambiar, lo importante es darse cuenta de la gravísima situación en la que estamos” 

Queremos a Milagro libre, queremos a los 50 presxs políticxs libres, queremos un gobierno que ponga huevo. Que haga lo que tiene que hacer y que hagamos lo que tengamos que hacer y tengamos los debates que tenemos como este, sin rompernos. Yo no me quiero romper, yo quiero estar unido con Massa, con Pichetto, con Randazzo, con Berni, con todos ellos, con los cuales, para que nadie se confunda, no tengo un carajo que ver pero quiero estar unido con eso. Ahora, no quiero que ellos me dirijan, ni que vacíen de contenido y de mística al kirchnerismo, eso sería un enorme error. ¿Y sabe que? Como yo no quiero nada, no quiero cargos, no quiero privilegios, no quiero nada, soy un tipo libre, libre. Puedo decir lo que se me cantan las ganas y además se que es lo que siente la enorme mayoría del pueblo kirchnerista. Alberto Fernández, cruzá la calle y llevá el decreto de indulto por favor.

Abrazo grandote y me despido hasta mañana con esta frase enorme que gritan los Pueblos del mundo que han luchado contra la codicia y la voracidad del Imperio, “yankee go home”.