Nos encaminamos a un 2023 que será como nosotros queremos que sea. Hay algunos especulan con resultados que no son los míos. Creo que tenemos que construir la victoria electoral del 2023. Tenemos que partir una de una contienda electoral que nos permita avanzar, acumular; que nos permita normalizar las variantes de un proceso de crecimiento, desarrollo, generación de empleo, estabilización de las variantes financieras, distribución de la renta nacional, justicia social. Este camino queremos.
No entendí, ni entiendo a aquellos que especularon primero con el default, el default anti-obrero, antipopular, el default que nos hubiese hecho muchísimo daño, que hubiese mandado el dólar a 400 pesos, que automáticamente nos hubiese generado la destrucción de salarios y precios de la economía y que, en poquito tiempo más Alberto Fernández como Fernando de la Rúa fueran, por la vía popular expulsados del el poder en la Argentina. Yo me negué a eso totalmente. Resulta que pase a ser este anti kirchnerista, que pase a ser anti argentino, que me compraron, que me pusieron plata en los bolsillos. ¿Quién me lo decía a eso? Bueno, un montón de trolls, la mayoría trolls, en los medios, en la red Twitter y también me lo decían algunos militantes que, lamentablemente, no conozco y me gustaría, de alguna manera, poderles discutir cara a cara. Empecé a hacer un repaso de mi historia personal y tengo más de 40 años de militancia inalterable al servicio de los movimientos populares de distinta especie, convenga o no convenga. Vengo de estar, por ser kirchnerista, 1000 días en la cárcel, si 1000 días. Entonces, no voy a aceptar que cualquier mamarracho, que no le conozco militancia alguna, desde nunca, venga a cuestionar las cosas que uno sinceramente piensa y defiende.
Ojalá que podemos construir unidad, que podamos construir ámbitos de participación democrática, que podamos construir un proyecto común, que podamos encarar los tiempos que vienen con la grandeza de espíritu, de corazón y de cabeza para poder ir para delante.
Yo en esta radio, y lo digo con total humildad, cuando empezó la pandemia hice un razonamiento, que me gustaría que los equipos de producción lo busquen y mañana lo trabajemos. Dije que, hace dos años y medio había, entre China y Estados Unidos una guerra comercial. Dije, todo esto hace dos años, que había entrenamientos militares de China, Rusia e Irán; que después de eso mataron a Soleimani, el general iraní en Irak. Que después vino el ataque de Irán a las bases norteamericanas en Irak y Siria y ahí empieza la pandemia en Guam. Nunca pudimos entender bien cuál fue el origen de la pandemia. ¿Sí fue la naturaleza o si fue una mutación del laboratorio? Todavía no lo sabemos. Y yo me preguntaba allá lejos, en ese tiempo: ¿la salida que la pandemia será la Tercera Guerra Mundial? Y cuando yo veo prolongarse en el tiempo el conflicto entre Rusia y Ucrania y que hoy dos países de de la Unión Europea están siendo seleccionados para un posible ataque de Rusia -lo que significaría el comienzo de la Tercera Guerra Mundial- la verdad me llena de asombro cómo pudimos tener semejante olfato para ver esto hace dos años. Y les voy a compartir una angustia, en uno de los países en danza, vive una hija mía, Ayelén D’Elía, en Estonia, ella es profesora en la Universidad de Tallin, que es la capital de Estonia. Viven con muchísimo temor, viven una situación harto compleja. Por lo tanto, necesito compartir esto con ustedes porque nunca pensé que estos análisis proyectivos en el tiempo, hasta que la vida de mis hijos, por lo menos, la de Ayer iba a estar cruzada por esta realidad.
Me gustaría que pudiéramos ir a fondo en estas cuestiones, reflexionarlas, preguntando a nosotros mismos, en estos tiempos de arsenales nucleares y otras yerbas, ¿cuál podría ser el destino final que la Tercera Guerra Mundial? No sé por que hoy me pasan por la cabeza las las visiones maltusianas que datan de 1812, esas visiones de Malthus que decían que al planeta sin proyectar amo a los números de hoy les sobran 3500 millones de seres humanos. Para estas bestias neoliberales conservadoras ¿No será que están pensando en la muerte como variante económica para equilibrar el planeta? Bueno, les dejo la inquietud.
Un abrazo enorme. Lo quiero mucho. Y trataremos, cada mañana, de hacer nuestro aporte a la construcción de esta conciencia nacional contra el coloniaje. Abrazo grande.
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